miércoles, 10 de febrero de 2010

Hora de hacer balance

Hoy, todo el día he estado pensando en todas las cosas que a una le apetece decir cuando esta despidiéndose, de algo realmente importante. La verdad es que he dudado mucho rato si decir lo que pienso realmente o no (unos dos segundos más o menos), porque como muchas y muchos sabréis, este blog y mis opiniones casi me cuestan una expulsión de la Organización de la que ahora me despido. Y empiezo por aquí porque no deja de parecerme sorprendente que este día haya llegado, que se acabe ya y que vaya a ser por un motivo de edad mi baja en las Juventudes Socialistas.

Alguien dijo de mi una vez, “ella es demasiado impulsiva, demasiado visceral”, estas lindezas, y no es en tono irónico, irían acompañadas de otras muchas que quien me lo contó, para evitar que me diera un colapso, decidió omitir, y ahora mismo no puedo dejar de pensar en ellas como el cumplido más grande que , sin querer, me han hecho.
Soy visceral, impulsiva y pasional, eso ya me lo decía mi madre, eso y lo de “nena, no digas todo lo que piensas siempre, no es necesario...” Como veis aquí estoy haciéndole caso.
Y es que así entendí yo lo de participar en política, como algo pasional y visceral, como un impulso que me saca de mis casillas cuando las cosas son injustas y que m hace decir lo que pienso desde la libertad en la que creo y por la que siempre lucho, y por ser así no pienso pedir perdón, nunca, en mi vida.

Pero bueno, empezando así parece que este haya sido el sufrimiento más grande de mi vida, que locura cuando es todo lo contrario. De mis años de militancia han sido nueve bien invertidos, me quedo con un montón de cosas, con las malas porque hacen sin dudas que valore más las buenas y con momentos inolvidables que son mi vida.

Me quedo con las personas que anónimamente muchas veces y otras desde un cargo orgánico o institucional se levantan cada día con ganas de cambiar las cosas a lo largo y ancho del País Valenciano, eso hace grande nuestra organización y nuestra lucha

Me quedo con los trepas que venden a su madre por un puesto de mierda en un órgano que no saben ni para qué sirve, porque esos hacen aún más grande a los de antes

Me quedo con los que se sientan junto a otros compañeros para parir campañas y proyectos sin pocos recursos que muchas veces se quedan en los cajones de los “pseudo lideres mundiales” no vaya a ser que las ideas de otros ensombrezcan las que ellos no tienen

Me quedo con las muestras de compañerismo, con los abrazos sinceros, con las palmadas en la espalda y con las lágrimas compartidas en la victoria y en la derrota

Me quedo con las puñaladas traperas, con las personas sin palabra y con las mentiras repetidas mil veces para convertirlas en verdad, porque con todo esto yo día a día me vuelvo si cabe más valiente a la hora de defender el socialismo




Me quedo con las Princesas, con mis pequeñas princesas republicanas, tuvimos que ser así para resaltar todas aquellas lindezas que se dijeron de nosotras, lindezas que por otra parte jamás se dirían de un compañero pero con las que aún hoy nos toca seguir peleando en esta organización.

Me quedo con las ganas de pelear y seguir luchando por lo que creemos y que ha hecho que no nos rindamos nunca y también que no nos vayamos nunca. Y aquí me explico, por aquello de “eres la mano en la sombra y bla bla bla”. Para mí la lealtad es bastante importante me temo, y no entiendo esto de pasar el relevo y dejar del lado a aquel o aquella en quien confiaste para que ocupara ese lugar. No se, ese sistema me gusta más que el de andar ejecutando a tus sucesores.

Me quedo con Borja y con su manera de quitarle hierro a mis crisis y de apoyar su mano en mi hombro y decirme “estamos en esto juntos” todas las puñeteras veces en las que lo hice mal o lo hice bien.

Me quedo con Alicia gritando en la puerta del despacho de Blanqueries cuando en realidad tiene el corazón más grande del mundo y es incapaz de ser mala ni aunque quiera.

Me quedo con Mar y su coherencia, su aguante y su entereza para afrontar un periodo jodido. Por cierto, los que intentasteis dar a entender que esta chica no valía y no le disteis tregua ni una vez sois una banda de capullos solo, aquí quitamos el puño, pero bueno, aún queda tiempo.

Me quedo con Alex y con su cansancio acumulado por haberse tragado todas y cada una de las épocas en el bando de “los buenos” y al que siempre le decimos eso de “lo sentimos, te toca quedarte, esta es tú generación”

Me quedo con Sandra y su coherencia, su manera de poner cordura en el tridente de Pelayo y sobre todo con su nobleza a la hora de defender y estar aquí aún sabiendo en lo que ya no cree, por estar con los suyos y hasta el final. Por cierto querido amigo, Sandra a parte de ser la novia de Jose, es la Vicesecretaria General de Pelayo, la Vicepresidenta del Consejo de la Juventud, tiene una doble licenciatura y trabaja en un despacho en el que tú no entrarías ni de bedel

Me quedo con Jose , nuestro hombre, el que le está dando a Pelayo esa energía y esas ganas que a muchas y muchos ya no nos quedaban y nos hacen volver a estar tan a gusto. El que tiene la palabra y la paciencia justas y sobre todo la pizca de locura necesaria para quedarse y encima ser feliz con todo lo que hace.

Me quedo con Iván porque al final tenía razón en casi todo, porque me aguantó en los peores momentos, porque celebramos juntos los mejores y sobre todo porque nunca en su vida se le ocurrió dejar de estar a mi lado cuando alguien decía eso de “dile a Alicia que se relaje” y sobre todo nunca me dijo “relaja”.

Y me quedo con Mateo, Lola, MC, Guio, Andrea, Esteban, Manzana, Borja,Victor, Javi niño, Javi Crak, y toda la nueva hornada de Pelayitos que mola tanto, por fa si me olvido de alguien que no me lo tenga en cuenta..
Me quedo con los Pelayitos más allá de las fronteras de una calle , vosotros sabéis quienes sois
Me quedo con Carmelina y sus ovarios de decir lo que había que decir sin miedo a las amenazas
Me quedo con Carmen y la injusticia que se ha cometido siempre con ella, una malvada más en la lista que alguien hace y nos toca jodernos. Pero todo pasa y todo llega

Me quedo con Carlos su chaqueta verde y su llave en el bolsillo, su valentía y su entereza


Me quedo con un montón de personas con nombres y apellidos que aunque no lo crean me han enseñado muchas cosas buenas que con el tiempo y la distancia he aprendido a entender mejor y sí, hacen que a veces me arrepienta de alguna cosa, y mira que no es mi estilo, pero, me arrepiento de que en ocasiones los que en realidad tenemos un proyecto similar de lo que son las Juventudes Socialistas no hayamos sabido parar, analizar, apartar lo personal, abordar las cosas con calma y salvar esta organización de lo que, a mi, ahora me parece su peor momento. Me explico, el peor momento para JSPV es cuando los que creíamos en JSPV aunque no estábamos de acuerdo entre nosotros nos obcecamos tanto en que el otro saliera perdiendo que acabamos poniendo esta Organización en manos de los que ni se la creen, ni la respetan, ni mucho menos apuestan por la independencia. De eso me arrepiento y mucho

Y también me quedo con las personas sin palabra capaz de mentirnos a la cara, de cerrar pactos contigo y venderte en el último momento, de fingir conversaciones telefónicas para no enfrentarse a ti. Me quedo con esos, los lideres que nunca lideran nada. A mi me van más los referentes.

Me quedo con Rafa y con Julio que supieron respetar nuestra independencia y nuestra diferencia aunque no siempre supieran entenderla

Me quedo con Ignasi Pla que venía a Pelayo a compartir una copa con las personas no con los cuadros políticos, y al que no había que prepararle un protocolo

Me quedo con Joan Calabuig y su capacidad de volver a ilusionarnos, incluso a mi, de nuevo en unas Jornadas de Formación.

Me quedo con Vicent Sarría cuando perdía su tiempo compartiéndolo con las Juventudes para ver que queríamos o qué necesitábamos, para enseñarnos, para ayudarnos, y por entender ese modelo de relación y no el del cuartito de atrás

Me quedo con Joan Lerma como persona y gran político

Y no me quedo con muchas de las cosas que en nombre de los anteriores se han hecho o dicho

Pero sin duda me quedo con volver a abrir la persiana de la Sede de Pelayo dentro de una hora para volver a ver a un montón de personas alrededor de una mesa en la que yo he compartido tanto sueños e ilusiones, en la última ejecutiva a la que asistiré como militante.

Y por todo esto si mañana tengo un hijo o una hija le diré sin ninguna duda. Afíliate a las Juventudes Socialistas.


Nota 1. Me quedan tres días así que no merece la pena tramitar ningún expediente por este blog, la edad ya hace el trabajo
Nota 2. No perdáis tiempo en comentarios anónimos e hirientes, creo que es obvio, me resbalan.

lunes, 30 de noviembre de 2009

Congreso Provincial

He escuchado y leído muchas opiniones y felicitaciones diversa en torno al I Congreso Provincial de Valencia de JSPV, y aunque me prometí que no diría nada más en este blog después de una de las traiciones más grandes que he vivido en esta Organización, la verdad es que no puedo evitarlo.
No quiero hacer una crónica de los acontecimientos porque para eso esta el blog de mi amiga Mar, que tanto me gusta y que con tan buen criterio desgrana la política y la manera de hacer política que últimamente vivimos, solo quiero dar mi visión, personal y tal vez un poco sentimental, de este sábado.

Lo primero es decir que estoy satisfecha y orgullosa. Satisfecha porque las cosas aunque no salieron como esperábamos una semana antes del congreso, salieron mejor de lo que podíamos imagina unas 24 horas antes, en casa de una amigo, volviéndonos locos pero sin que faltara la sonrisa.
Satisfecha porque una persona como Carmelina Pla tuviera la valentía de llegar hasta el final en un Congreso donde las amenazas y las presiones previas fueron la nota dominante.
Orgullosa porque Carmelina dijo lo que muchos pensábamos, en un discurso que era suyo, y que no emocionó a todas y todos.
Orgullosa por la fuerza de las y los delegados que estaban en ese barco y que no perdieron la ilusión y la emoción en ningún momento, aunque el cansancio después de tantas horas fuese más que palpable.
Satisfecha por ver un plenario en pie aplaudiendo al compañero Raimon Calabuig después de una retirada necesaria desde su punto de vista personal.
Satisfecha por volver a verlo en pie cada vez que se nombraba al compañero Samuel Falomir, Secretario General de la Provincia de Castellón, por todo lo que esos aplausos tenían de fondo y que todas y todos los que estebamos allí conocíamos perfectamente.
Orgullosa de nuestro patillas, de nuestro hombre de hierro con corazón de "patito" cuando hace falta, si alguien pudiera estar dentro de mi para sentir lo que sentí al verlo subir a ese escenario, entendería mucho mejor qué es lo que aún me aferra a este partido y a estas juventudes, que yo me creo todavía.
Orgullosisima de Alex y Sandra con sus risas y sus cabreos y de nuevo risas, con su manera de ver las cosas y su inquebrantable unidad, pero también del resto de la delegación que se que ha vivido su primer congreso con una sensación agridulce, que es lo que casi siempre pasa, y me duele por ellos tanto como me dolió la primera vez que fui a un Congreso con la misma sensación. Lo bueno es que se que eso se supera y las energías aumentan siempre.

Pero también puede que este un poco cabreada, solo puede, porque las cosas cada vez me afectan menos, gracias a Dios, pero me siguen afectando.
Cabreada por las mentiras de siempre que ya dan mucha risa, por el interés de quitarle el protagonismo a los verdaderos protagonistas, por las caras de reconciliación de algunos que ya no saben como explicar lo traidores que son. Y sobre todo porque no es aceptable que se haga un discurso de clausura que intente echar leña al fuego de una Organización que casi todos los días sufre una combustión espontánea. Me pareció irresponsable, lamentable, prepotente y un reto sin sentido que si hay que aceptar se aceptará.
Creo que hizo falta cerrar de verdad y no en falso, hizo falta reconocer que ese 90 y pico por cien se debía a que tras una larga negociación se llegaba a un acuerdo, e hizo falta reconocer el papel de una mujer valiente como Carmelina. Pero no paso, como muchas cosas que no pasan y siempre se cierran en falso.
La verdad es que como no todas y todos tenemos la oportunidad de agradecer a nuestros amigos del alma las cosas desde un atril, he querido hacerlo aquí. Gracias a los que me quieren y a los que me odian porque de todos yo saco algo positivo.
Como decía estoy contenta en general porque he vuelto a aprender de muchas personas y eso es para mí siempre un honor en los tiempos que corren

Por último dar la enhorabuena a la nueva Comisión Ejecutiva Provincial de Valencia

lunes, 18 de mayo de 2009

La palabra



Yo ya no quiero decir nada

Decir que No


Ya lo sabemos

es difícil decir que no

decir no quiero


ver que el dinero forma un cerco alrededor

de tu esperanza

sentir que otros los peores

entran a saco por tu sueño


ya lo sabemos

es difícil decir que no

decir no quiero


no obstante

cómo desalienta

verte bajar tu esperanza

saberte lejos de ti mismo


oírte primero despacito

decir que sí

decir sí quiero

comunicarlo luego al mundo

con un orgullo enajenado


y ver que un día

pobre diablo

ya para siempre pordiosero

poquito a poco

abres la mano


y nunca más

puedes cerrarla.

Mario Benedetti